miércoles, 11 de septiembre de 2013

Día 66: Con la pelota no basta

Cidoncha lamenta su fallo a puerta vacía ante el Lugo (Foto: realzaragoza.com)
Cinco partidos después, el Real Zaragoza sigue sin cogerle el pulso a su fútbol. La arritmia se explica en varias constantes inconstantes de su juego y, seguramente, en otros aspectos menos tangibles que tienen que ver con el coco. Dijo Paco Herrera tras la eliminación de ayer en Vitoria en declaraciones a Aragón TV que este equipo tiene muchas cicatrices. Puede ser una buena explicación, pero detrás de su fútbol se esconden muchas otras lagunas.

Poco antes de confirmarse su llegada al conjunto aragonés, Herrera ya dibujaba las líneas maestras de su ideario en El Periódico de Aragón: "Me gusta que mis equipos jueguen bien al fútbol. Hay que intentarlo y definirse por un estilo de juego", explicaba entonces. Lo cierto es que desde el inicio de Liga el técnico ha mantenido esa premisa básica de encaminarse por el juego de toque y tener el balón. La idea parece buena, de hecho para muchos equipos (más allá del Barcelona y la selección española) es un buen recurso.

El propio Herrera lo ha venido confirmando en el Celta en las dos últimas campañas. Aquí algunas líneas maestras:


¿Cuál es el problema entonces? Pues en una primera observación general, que el equipo aún no ha sabido adaptarse a estos mecanismos. En las cuatro jornadas de Liga y el efímero paso por la Copa ha quedado sobradamente demostrado que el equipo aún debe afinar y mucho su sistema combinativo. El Zaragoza tiene la pelota, la amasa, la mueve pero no es capaz de encontrar una salida ventajosa. Sea mérito rival o demérito propio, durante muchas fases de esos cinco partidos muchas jugadas han muerto por la ausencia de un apoyo sólido, de un jugador que dé salida al balón con solvencia, que le permita seguir un movimiento normal y correcto acorde a lo que desea Herrera. El sistema combinatorio muere por la poca movilidad de los jugadores, por la carencia de apoyos de calidad o por la incapacidad de generar situaciones de ventaja con esa circulación del balón (que por ahora se antoja algo lenta en muchos tramos).

Poca eficacia

La conclusión es clara: pocas veces un jugador del Zaragoza recibe el balón con cierta comodidad como para pensar y poder buscar a su alrededor la mejor opción de pase hacia otro jugador en sus mismas circunstancias de ventaja. Esa ausencia de fluidez lo complica todo. A lo mejor ese sistema que siempre ha definido a Paco Herrera no es extrapolable al Real Zaragoza o a lo mejor es el Real Zaragoza el que no dispone de los mimbres necesarios para apostar por esa idea. Quién sabe. Lo cierto es que, exceptuando ligeros raptos de alegría futbolística cada vez menos habituales, el Zaragoza tiene el balón y lo mueve con cierta solvencia, pero no sirve para nada. Es decir, con la pelota no basta. Y no basta por ese escaso desarrollo de movilidad y acierto a partir del centro del campo. Tener mucho la pelota y pasarla una y otra vez lejos del área rival no sirve de mucho...

Lo demuestra el hecho de que el Zaragoza sea el equipo menos goleador de Segunda División (junto con el Castilla). Ese detalle no debería llevarnos a preocupación, a veces hay rachas de mala suerte. Lo que sí debe preocuparnos es que cada vez son más escasas las ocasiones del equipo. Ante el Lugo, sólo disparó una vez a portería y su ocasión más clara, que malogró Cidoncha de manera inexplicable, se generó tras un error del portero rival y no tras una buena combinación ofensiva.

Ante este escenario, la eliminación en Copa me parece un mal menor. Sin tener que atender esa competición, el equipo tendrá más tiempo para curar sus cicatrices y arreglar esos desajustes en su juego que lo han hecho completamente inofensivo hasta la fecha. Al menos, queda el consuelo de ver que el equipo mantiene una cierta solidez en defensa, siendo el quinto equipo menos goleado de la categoría. Eso supone un buen comienzo...

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2 comentarios:

Penagua dijo...

"El sistema combinatorio muere por la poca movilidad de los jugadores, por la carencia de apoyos de calidad o por la incapacidad de generar situaciones de ventaja con esa circulación del balón"

Es dificil definirlo mejor, lo has clavado. El problema de todo esto es intentar implantar un sistema de fútbol asociativo en el centro del campo cuando tus jugadores no pueden jugar a eso.

Tras haber visto los 5 partidos contra rivales de segunda yo he llegado a la conclusión de que el problema está ahí, en el centro del campo.

El primer gran problema parte del pivote "defensivo", puesto que si quieres jugar un fútbol de toque, asociativo, todo debe empezar ahí. Y no me estoy refiriendo a que pidamos un jugador que te haga pases de 20 metros o que filtre balones entre las defensas rivales, pero si alguien que pueda dar un pase a un compañero a 5 metros.

Luego el problema sigue con los interiores que rodean al pivote. Que no tienen la movilidad ni calidad necesaria para combinar, en ocasiones los ves moverse por el campo como pollos sin cabeza.

Y aquí nos encontramos el problemón: al no ser capaces de dar 3 pases seguidos (literal) en la zona trecuartista, no hay forma de filtrar un pase a la delantera o de generar una situación de ventaja en el área o sus proximidades.

En defensa no pasamos demasiados apuros juegue quien juegue, no nos han hecho mas de un gol en ningún partido. Es decir, hay que mejorar pero no es la parte preocupante del asunto.

En delantera hay problemas, cierto. Pero también es cierto que no ha llegado un balón en condiciones en 5 partidos. Veo en Ortí un delantero capaz de dar muy buenos apoyos pero no un goleador. Si encontrase un buen socio goleador podrían generar muchas situaciones de ventaja.

Unknown dijo...

Me alegro de que te haya gustado! Comparto al cien por cien tus dos últimos párrafos.

A ver si este sábado empezamos a ver la luz!

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